6 pasos para convertir tus cursos y crear cursos E-learning
Estamos en tiempos en los que la educación a distancia no es una alternativa, es la única opción.
Conocer cómo transformar un curso presencial en contenido online es muy desafiante si nunca nos hemos visto enfrentados a la tremenda industria que hay detrás de la creación de cursos elearning, la que es mucho más parecida a la producción audiovisual que a las salas de clases de una universidad.
Un consultor, profesor o facilitador que ha trabajado siempre enseñando de forma presencial, al verse enfrentado al desafío de transformar sus cursos a un formato online, probablemente no sepa por dónde comenzar.
Si este es tu caso, estás en el lugar correcto. Nos especializamos en apoyar personas como tú y de hecho, si estás acá es porque estás buscando formas de convertir tu conocimiento en aprendizajes para tus alumnos y ese es también nuestro objetivo.
El 90% de las personas que acceden a un curso abierto en línea nunca lo concluyen, y mucho de ese problema está en el diseño instruccional con el que fue construido ese curso, sin pensar en la experiencia del alumno. Un curso Elearning debiera generar en el alumno la motivación intrínseca y extrínseca suficiente como para que se motive por educarse tanto como se motiva al ver Netflix.
Y no es que lo hayamos logrado aún, pero sí se realizan cada día más esfuerzos en esa línea a través de la integración de la gamificación, juegos serios, realidad aumentada, realidad virtual, narrativas, desafíos, chatbots y todo lo que podamos transformar en uno objeto de aprendizaje.
Nada de esa tecnología educativa va a servir si un curso no tiene un diseño instruccional adecuado, con objetivos de formación bien definidos, con objetos de aprendizaje atractivos y en una plataforma de cursos versátil que motive al alumno. Nadie quiere tener un curso con un 90% de abandono.
Por eso, en este post queremos compartirte 6 pasos prácticos para transformar tus cursos presenciales en cursos en línea.
6 pasos para crear un curso online
Cada paso da para hablar mucho más del tema, por eso iré ampliando este post semanalmente con otros que lo complementarán. Síguenos!
Haz un inventario de contenidos
Reúne todo el material que tengas relacionado con el curso que quieras construir. Todo sirve: PPT, notas, actividades que alguna vez realizaste, hojas de trabajo, material auxiliar, etc. Crea una carpeta y añade toda la información que pueda ser útil.
Si eres más tecnológico, te recomiendo crear tu carpeta en Google Drive y una página en Google Sites en la que agregues todos los enlaces de interés , ideas, cursos relacionados y así crear tu propia base de conocimientos acerca del tema.
Define los objetivos del curso
Se trata de describir lo que logrará el alumno una vez finalizado el curso.
Algunos dirían que es el primer paso, pero normalmente los que hacen cursos parten desde el material que ya tienen y no definen objetivos de formación. Esto hace que caigamos en redundancias, en falta de contenido y/o no cumplir con el objetivo comprometido.
Una forma simple que puedes usar para construir objetivos de formación es la estructura del “Cuándo – Quién – Qué”
Un ejemplo de objetivo de formación ser: “Al finalizar la lectura (Cuando), el diseñador de cursos en línea (Quién) será capaz de identificar los pasos para transformar un curso presencial a e-learning” (Qué).
Los objetivos de aprendizaje se pueden dividir en 3:
Objetivos de conocimiento – objetivos de habilidad – objetivos de actitud, pero hablaremos de esto en otros post.
Pocas veces nos ponemos a pensar que los objetivos de formación tienen niveles de complejidad. La Taxonomía de Bloom es la herramienta fundamental de creación de objetivos, que nos enseña que el nivel más simple es “recordar” y el más alto es “crear”. Nuestros objetivos de formación deben ser realistas en los objetivos que podemos lograr y los que no, sobre todo si estás comenzando en tu primer curso virtual. Es mejor partir con objetivos de aprendizaje de niveles inferiores como recordar y comprender, dado que será más simple de evaluar.
Cuando hablamos de formación en línea, el nivel que alcancemos dependerá, en gran medida, de los recursos tecnológicos con que contaremos, la creatividad del diseñador instrucciona,l y si el LMS o la plataforma de cursos en línea que utilicemos permita o no aprendizaje social e interacción con compañeros y profesores.
No es nuestra idea detenernos en este punto, en este post, pero si quieres saber más de la Taxonomía de Bloom y los objetivos de formación mira la página de Ideas Para Profes.
Ordena tu contenido y simplifica
Revisa el material que recopilaste y determina cuál es el más adecuado para cumplir tus objetivos de formación. Una buena forma es categorizar el material de acuerdo a 3 parámetros: Bueno saber, útil saber y esencial saber.
Puedes escribir estas ideas en “post it” y luego extraer la idea principal de tu curso.
Define el orden en que presentarás el contenido a tus alumnos imaginando que tienes que enseñarlos sólo lo que categorizaste con “Esencial Saber”. Añade lo útil de saber y sólo si es necesario, lo bueno de saber.
Transforma el contenido en lecciones de entre 4 a 10 minutos cada una.
Crea material educativo diverso
En los cursos en línea, la forma es tan importante como el fondo. Por lo que hay que ser creativo a la hora de transformar nuestro conocimiento en objetos de aprendizaje. Un objeto de aprendizaje puede ser un vídeo o un material de lectura, un desafío de aplicación al puesto de trabajo, un juego serio educativo, un webinar, ETC.
Cada día existen más herramientas para la creación de recursos educativos innovadores. Dentro de las más conocidas: Canva para la creación de diseños y H5P y Genially en creación de juegos y material educativo interactivo, pero de esto hablaremos más adelante.
Recuerda crear material que permita a tus alumnos demostrar que lograron el objetivo de aprendizaje.
Elige una plataforma de cursos en línea
Elegir la plataforma en la que alojarás tu curso es como elegir el edificio y la sala de clases en la que estará alojada tu institución físicamente. Es ideal que la plataforma de cursos en línea que elijas permita una experiencia de usuario motivante.
Hoy existe gran cantidad de alternativas para quienes comienzan en el mundo de los cursos en línea. Estas plataformas permiten alojar y comercializar tus cursos sin necesidad que implementes tu propio servidor, dominio o sistema de venta en línea. Su desventaja es la alta deserción de los alumnos.
Si estás pensando en crear un curso masivo y probarlo al mercado, una alternativa es Udemy, quienes mediante un modelo de negocios de ganancias compartidas, te alojar y comercializar tus cursos el línea sin costo.
Por otra parte, si ya estás decidido a crear tu comunidad y a lanzarte a la piscina, lo mejor es tener tu propia escuela en línea. Existen muchas visiones acerca de qué plataforma de escuela en línea ofrecer.
En Reevolutiva queremos generar aprendizajes que mejoren la calidad de vida de los alumnos, por esto nuestra plataforma está enfocada en el aprendizaje social, que busca que el alumno sea protagonista de su propio aprendizaje a través de la interacción con otros.
Para nosotros, el aprendizaje es un viaje acompañado y este acompañamiento se debe manifestar en el diseño de nuestros cursos. Por esto, investigamos y desarrollamos constantemente nueva tecnología educativa y metodologías.
Te recomendamos darte una vuelta por nuestra plataforma educativa en línea.
La diferencia que tiene una plataforma para una comunidad educativa en línea con las plataformas de cursos en línea es que las plataformas para comunidades educativas además de contener cursos Elearning, cuentan con una completa red social privada, con salas de clase, equipos y grupos de trabajo, seguidores, likes, post, gif , etc. Así, la sala de clase se transforma en algo más parecido a un grupo de Facebook y las clases magistrales se transforman en un vídeo interactivo.
Haz del aprendizaje una experiencia
¿Has estado alguna vez en una clase de la que sólo querías salir corriendo?
El aprendizaje debe ser participativo, dinámico y entretenido para que se registre fácilmente en la memoria de nuestros alumnos. Siempre se debe procurar despertar la curiosidad desafiándolos con preguntas que ellos mismos deberán ser capaces de responder.
Es acá donde entra en juego la Gamificación y los objetos de aprendizaje interactivos, los simuladores, juegos serios y la gran cantidad de experiencias disponibles actualmente para generar contenidos de capacitación dinámicos.
El error más común es no tomar en consideración las variables emocionales que impactan en el alumno y por sobre todo, las cosas que los desmotivan.
Cuando el nivel de un curso es muy bajo o muy alto para el alumno, este se desmotiva. También cuando el contenido no es relevante o aplicable a sus necesidades.
No todos los alumnos aprenden exactamente igual, y por lo tanto, si en tu contenido hay poca variedad de objetos de aprendizaje y baja interacción, lo más probable es que tu alumno se tenga que esforzar por terminar y esto es lo que queremos evitar.
La experiencia del alumno debe ser como la experiencia de cualquier cliente. Tiene que ser impecable desde antes de la compra y durante todo el ciclo de vida de tu cliente. Recordemos que nuestro objetivo es su satisfacción y lo mejor que podemos entregarles es un aprendizaje significativo, acompañamiento y sentido de competencia.
En Apple siempre escuché: “Surprise and delight”…
Sorprender y deleitar a los alumnos no es tarea fácil, pero debiera estar en el centro de cada actividad de formación. Dado que el cerebro registra para siempre los momentos emotivos, debemos generar experiencias positivas a nuestros alumnos y hacer de ellas algo que valga la pena recordar.
Y tú: ¿Cuál crees que es la mayor dificultad para transformar un curso a elearning?
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